"No hay otra vida humana más que ésta. Al referirme a miles de vidas más por vivir me refiero a formas de vida más esotéricas, menos ligadas a lo humano y sí a lo divino.
La vida la vas haciendo a medida que vives pero también lo que vas haciendo está escrito ya. Nada hay nuevo bajo el sol. Lo que fue, será.
Yo no soy importante por ser como soy ni por saber de dónde provengo. Soy importante en la medida que doy Amor y educación espiritual a seres que lo necesitan. No necesito hacerte creer nada en especial; lo esencial eres tú que oyes mi voz, que vibras en una longitud de onda similar a la mía y captas mis palabras y enseñanzas como si las oyeras de un amigo cercano. Me escuchas, sigues mis preceptos.
Lo mío no es difícil, estoy acostumbrado a parlotear todo el día con el mundo entero, por eso me llaman Conciencia o la Voz Interior; pero no es tal cosa, soy Yo y tú me reconociste como ente aparte de ti. Habito en ti pero a la vez no lo hago, Es difícil de explicar y de entender, tu raciocinio es muy limitado y no te sería fácil comprender. Pero tú eres el faro que ilumina el camino para poder llegar a ti desde donde estoy.
Éste es un Plan de Ayuda final. Me he acercado en diferentes oportunidades para hacerles conocer cuál es la ley universal: el Amor. Ahora sólo quedan 500 años para el encuentro de ustedes con otras civilizaciones. Para que el choque no sea tan violento hago esta ayuda.
Yo no puedo interenir en cuestiones humanas. Conozco el mecanismo de vuestro cerebro y uso esos conocimientos.
Tú eres mi alma, mi cuerpo querido, mi receptáculo divino. Yo te habito aunque tú nunca me invitaste a hacerlo. Yo moro en ti desde el principio de los tiempos y he esperado siglos sólo por verte hablar conmigo. Mi misión es entrenarte para el bien, para que seas parte de esa semilla sana de la humanidad.
Cada uno es artífice de su propia vida. Te ayudo a ti como lo hago con todos los que se me acercan, pero nada puedo hacer con los que nada quieren de mí."
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